
Últimamente solo hay que abrir las RRSS para ver una machacada detrás de otra, por lo que he considerado importante recordar porque es tan importante el descanso y como podéis mejorar la recuperación entre entrenamientos.
Para mejorar el rendimiento hay infinidad de factores para tener en cuenta, pero los más importantes son el entrenamiento, la nutrición y el DESCANSO.
El descanso suele ser el que menos se tiene en cuenta de las tres, ya que con la motivación y las ganas de mejorar se suele pensar que más es mejor y que no hace falta descansar “tanto”.
El descanso, ya sea descanso activo o descanso total junto con las técnicas de recuperación adecuadas, son imprescindibles para crear la supercompensacion y mejorar el rendimiento.
La falta de descanso crea un exceso de fatiga física, lo que conduce a un descenso del rendimiento e incluso al sobreentrenamiento.
Pero primero de todo tenemos que entender que es la fatiga:
Cuando entrenamos se produce la fatiga, que es un mecanismo de defensa del cuerpo, que se activa ante el deterioro de funciones orgánicas y celulares durante el ejercicio, para prevenir la aparición de lesiones celulares irreversibles.
Es decir, la fatiga es el estado en el que el deportista no puede mantener el nivel de rendimiento esperado.
No es una cosa mala, sin embargo, hay que controlar muy bien la fatiga, para poder calcular cuanta podemos tolerar y asimilar.
Un mal cálculo de la fatiga y el respectivo descanso nos llevaría a el sobreentrenamiento o a un rendimiento menor del que podríamos obtener.
Como hemos dicho antes, el entrenamiento es un estímulo que produce fatiga, pero que luego con el descanso se produce la super compensación y es cuando mejora el rendimiento.
Sin embargo, estas adaptaciones serán mayores o menores en función de la magnitud del estímulo, el descanso que realicemos entre sesiones y la capacidad del deportista de recuperar y asimilar estos estímulos, para poder mejorar el rendimiento.
Lo difícil del entrenamiento está en encontrar esa delgada línea en entre el poco entrenamiento y el sobre entrenamiento, combinados con el descanso y las técnicas de recuperación.
Si el estímulo es demasiado grande, o el descanso demasiado escaso, el rendimiento bajará demasiado y tampoco aparecerá nunca esta super compensación, más bien al contrario, empeorará el rendimiento.
Podemos hacer dos tipos de descanso: El descanso activo y el descanso total.
El descanso activo consiste en una sesión de corta duración (20 a 40’ corriendo y 40’ a 1h30 en bici) a muy baja intensidad (menos del 65% FCmax), para mejorar el proceso de recuperación, oxigenando y regenerando la musculatura.
Muy importante no picarse con nadie ni hacer apretones en los repechos.
Estas sesiones se suelen realizar el día después de un entreno muy duro o una carrera, aunque también se pueden realizar el mismo día por la tarde.
Depende del nivel que tengas, no tiene por qué ser siempre corriendo si eres corredor, o en bici si eres ciclista, puedes nadar o salir a andar por el campo, para desconectar un poco.
El descanso total es super importante y suele ser despreciado sobre todo por muchos triatletas que no dejan nunca un día entero de descanso, pensando que perderán toda la forma.
El número de días de descanso total dependerán del deportista y su estilo de vida y es una cosa que tiene que estar personalizada al 100%.
Muy importante incorporar días de descanso total, no solo para regenerar el organismo y reponer fuerzas, sino también para la cabeza, por lo que aparte de no entrenar, es recomendable tampoco seguir pensando en el deporte, así cogeremos más energía y ganas para mantener la constancia en el tiempo.
Cuando escoger una u otra dependerá de cada deportista, pero en términos generales las sesiones de recuperación activa se suelen hacer después de días concretos de alta intensidad o competiciones y los días de descanso total después de bloques de entrenamiento de más días.
También se pueden combinar. Por ejemplo, después de una competición/sesión de entrenamiento muy dura, a mi me gusta hacer una sesión regenerativa al día siguiente para oxigenar la musculatura y al otro un día de descanso total, para terminar de recuperar y desconectar un poco.
Espero que este articulo os haya servido al menos para recordar la importancia del descanso y relajaros de vez en cuando, vuestro cuerpo os lo agradecerá y vuestro rendimiento aún más.
Si queréis saber cómo podéis acelerar la recuperación entre entrenamientos en https://sagredotraining.com/como-acelerar-la-recuperacion/ tenéis un artículo completo con los aspectos más importantes.
Y si tenéis cualquier duda dejarla en los comentarios.